La remolacha es perfecta en este escenario porque es un carbohidrato de bajo índice glucémico, es decir, la velocidad con la que se convierte en azúcar en la sangre es lenta, lo que previene la diabetes.
Bueno para la piel
La remolacha tiene antioxidantes y esto ayuda en el proceso de oxidación de radicales libres, aportando muchos beneficios a la piel.
Por ser un desintoxicante natural, ella purifica la sangre, proporcionando un brillo extra a la piel.
Sin mencionar que ayuda contra espinillas y forúnculos, además de prevenir el envejecimiento prematuro.
Previene el
estreñimiento
Entre los beneficios de la remolacha está el hecho de
ser rica en fibra alimenticia, esto contribuye mucho a la digestión, además de
mejorar la evacuación al actuar en el ablandamiento de las heces, previniendo
el estreñimiento.
Ayuda al hígado
Debido a que contiene metionina y betaína, la remolacha ayuda con el buen funcionamiento del hígado.