Preparación
Para empezar, tritura varias hojas de salvia seca hasta obtener un polvo fino. Si prefieres, consulta en el herbolario si hay extractos de salvia en polvo.
A continuación, vierte el polvo de salvia en un frasco previamente esterilizado.
En seguida, añade las cucharadas de miel y mezcla usando una cuchara de madera.
Cuando el preparado esté listo, tápalo y déjalo en un lugar fresco y oscuro durante 24 horas.
Pasado este tiempo, empieza a utilizarlo.
Modo de aplicación
- Limpia bien la superficie de la herida y aplícale el remedio de salvia y miel.
- Masajea con cuidado y déjalo actuar durante 20 o 30 minutos.
- Cuando trascurra este tiempo, enjuaga con agua templada.
- Repite su aplicación 2 o 3 veces al día, hasta que la piel se recupere completamente.
Precaución: evita utilizar este remedio si el corte o la raspadura están abiertos. Ten en cuenta que las heridas graves deben ser tratadas por un profesional, lo antes posible. Así pues, si a simple vista es severa, consulta de inmediato.
¿Ya tienes este remedio en tu botiquín? Ahora que sabes cómo prepararlo, asegúrate de tenerlo a mano para curar esas heridas leves. Ten en cuenta que el preparado puede durar uno o dos meses si se almacena en el refrigerador o un lugar fresco.
Fuente: https://mejorconsalud.com/