Posibles beneficios…
- Contribuye a eliminar toxinas y residuos ácidos e impide que se vuelvan a formar, previniendo enfermedades.
- Ayuda a hidratar el cuerpo.
- Tiene propiedades antiedad que protegen la salud de la piel.
- Sirve para limpiar el colon y evitar el reflujo y la gastritis.
- Refuerza el sistema inmunológico.
- Como la acidez tiene una relación directa con la aparición del cáncer, se ha utilizado en tratamientos para frenar su crecimiento.
- Reduce la fatiga.
- Previene la osteoporosis, enfermedades cardiovasculares, el asma y la diabetes.
Y de los efectos secundarios
Si bien aparentemente sus bondades superan sus eventuales efectos adversos, en exceso podría ocasionar:
- Que el intestino delgado se vuelva alcalino y que esto favorezca la aparición de infecciones urinarias.
- Que la acidez presente en el estómago se reduzca a tal punto, que no actúe matando y expulsando bacterias y que estas entren en el torrente sanguíneo.
- Hipertensión.
- Dolor muscular.
- Náuseas.
- Temblores en las manos.
- Sensación de hormigueo en las extremidades.
- Confusión.
Mientras se llevan a cabo investigaciones con resultados más contundentes, es preferible tener moderación y hacerle caso al dicho “de lo bueno, poco”.