Cuando el hígado no puede controlar la bilirrubina, los riñones terminan por interferir en el color de la orina.
3 – Mala digestión
El órgano también es responsable de la bilis en el organismo. Pero si está mal, los niveles aumentarán drásticamente con diarrea y mala digestión.
Otros síntomas comunes son: síndrome del intestino irritable, cálculos biliares, intolerancia al alcohol, hinchazón y estreñimiento.
4 – Diarrea, estreñimiento y sangrado intestinal
Es importante destacar que el hígado también es determinante para una acción coagulante. Cuando se cuenta con una dificultad en el órgano, es posible sufrir con sangrado en el intestino, estreñimiento o diarrea.
5 – Dolor abdominal
Toda la región del abdomen es bastante sensible y dolorosa.
6 – Retención de líquido
Dará para observar esta retención, especialmente, en los pies y los tobillos.
7 – Alteraciones abdominales
Si usted está con calambres, dolores en el vientre o hinchazón en el cuerpo, preste mucha atención. Estos cambios son señales de que su hígado no está funcionando bien en función de la grasa.