Tome un poco de aceite de coco, aplique directamente sobre el cuero cabelludo, masajee y deje para el día siguiente.
Para un efecto aún mayor, caliente un poco antes de aplicarlo en la cabeza.
Si usted no encuentra el aceite de coco, aceite de oliva se recomienda también.
Lo ideal es aplicarlo en el cuero cabelludo tibio masajeando, dejándolo actuar durante toda la noche y por la mañana lavar como de costumbre.
Esto puede hacerse de dos o tres veces a la semana.
Pero si su cabello es muy grasoso, se recomienda hacer una o dos veces.
3 – Cebolla y el limón
Tome una cebolla y un limón y extraiga los jugos.
Mezcle y aplique sobre el cuero cabelludo, masajeando siempre para estimular los folículos pilosos, que es donde nace y crece el pelo.
Hacer esto durante la noche y enjuague con agua tibia.
Realice este procedimiento una o dos veces a la semana.
4 – Las remolachas
Entre las mejores opciones para los tratamientos caseros para la pérdida del cabello, tenemos la remolacha.